La Luna
La luna está enojada conmigo. ¿Por qué? Será porque esta noche no he danzado, y he cerrado mis cortinas. ¿Por qué me ama tanto ese rostro blanco y cansado? ¿Se habrá aburrido de la belleza del sol? Dormiré, después me hablará.
Quiere inspirarme temor. Su mirada es oscura, y ha fruncido el ceño. Quiere lanzarse como un metiorito contra mí, ¿tan poco le importan los hombres que dejará de iluminarlos? Danzaré por última vez, yo no vivo para nadie, menos para la vieja luna.
Se ha calmado, pero sabe que será la última vez. Está mirando de reojo, como si quisiera asustarme. Pero yo no temo a los ojos de una cabeza anciana. Si se lanza hacia aquí se las verá con Dios más tarde. Ella es blanca y cansada, ha de obedecer a Dios. Yo sé danzar, y mi baile es libre. Quizás es eso, la luna me admiraba, pero ahora tiene mente de hombre y me envidia. Pretendía que yo viviera para ella, ya que sabe que es incapaz de bailar y de convertirse en hombre joven. Desperdició la oportunidad en su juventud, cuando aún podía unirse al baile silencioso de los astros del universo. Ahora está enojada, pero cuando los miran los estúpidos niños que están descubriendo el mundo tiene que hacerce la buena. Me río de tí, luna. Me das lástima. Apuesto a que ya no quieres verme bailar. ¿Por qué estoy luchando contigo? ¡Déjame tranquilo, envidiosa! ¿Qué? ¿Nadie antes te miraba con estos ojos no es así? ¡Pues es hora que sepas que en la Tierra pueden nacer astros más inmensos que tú! ¿Sabes quiénes habitamos en la Tierra? ¡Sin nuestros ojos tú no podrías ser bella! Ahora algunos somos dueños de nuestros ojos, y no nos impresionamos ante tus antiguas técnicas para hacernos admirarte. Has de aprender a vivir con ojos intéligentes mirándote, si tienes paciencia verás que ellos sabrán honrarte, no sólo escribirte odas de adolecente confundido cada vez que recuerdan que sienten miedo y tú con tu aire celestial te conviertes en milagro.
Ahora nosotros reclamamos la belleza. ¿Qué vas a hacer Luna? Mírame a los ojos... Enfrenta la realidad, e ilumina las noches de los hombres por un largo tiempo más.
© G_Freeman
